Fasciculaciones musculares en reposo foro

Fasciculaciones en todo el cuerpo
Para que me entiendan: Tengo espasmos en los músculos entre el pulgar y el índice unas 50 veces al día que mueven cualquiera de estos dedos involuntariamente. También tengo fasciculaciones en los músculos de las pantorrillas, los muslos, los brazos y la vagina (¡lo siento, chicos!).
Yo votaría que sí. Lo peor son las piernas, y me ocurre sobre todo cuando intento dormirme. Puede afectar mucho a mi calidad del sueño, así que puede que merezca la pena ir al médico de cabecera o probar un suplemento o spray de magnesio, o poner sales de Epsom en un baño caliente (pero comprueba primero que no causa problemas con ninguno de tus medicamentos).
Gracias por tu comentario. Estoy esperando los resultados de la resonancia magnética y todavía no tengo un diagnóstico. Mis síntomas han ido empeorando constantemente en lugar de recaídas y mesetas. Espero que sea una buena señal, pero soy plenamente consciente de que puede que no lo sea. Intento mantenerme positiva, ¡sólo juego a la espera!
Buena suerte con los resultados de la resonancia magnética, tuve espasmos musculares y espasmos al principio de mis síntomas junto con otras sensaciones como sensación de humedad en la pierna (aunque seco), parches fríos y hormigueo junto con la pierna arrastrando ligeramente. Nunca tuve espasmos vaginales, no sé cómo me sentiría al respecto
Fasciculaciones musculares en todo el cuerpo todos los días
La ELA afecta a las motoneuronas superiores, que están en el cerebro, y a las motoneuronas inferiores, que están en la médula espinal y el tronco encefálico. La degeneración de las motoneuronas superiores suele causar espasticidad (tensión en un músculo), lentitud de movimientos, falta de equilibrio e incoordinación, mientras que la degeneración de las motoneuronas inferiores causa debilidad muscular, atrofia muscular (contracción de los músculos) y fasciculaciones. En la ELA, estos síntomas pueden darse de forma combinada, ya que las motoneuronas superiores e inferiores se ven afectadas al mismo tiempo.
La ELA puede afectar a personas de cualquier edad, aunque suele aparecer a finales de la mediana edad. La ELA suele manifestarse con debilidad o espasticidad persistentes en un brazo o una pierna (en el 80% de los casos), lo que dificulta el uso de la extremidad afectada. A veces (en alrededor del 20 por ciento de los casos) el problema se presenta primero en los músculos que controlan el habla, produciendo alteraciones en la calidad vocal, o en la deglución, que pueden provocar tos y ahogo. La enfermedad también puede afectar a los músculos de la cara, dando lugar a problemas como el cierre incompleto de los ojos y el babeo. La ELA puede incluso manifestarse como risa, llanto o bostezo inapropiados (afectación pseudobulbar). 1,2
Síndrome de fasciculación benigna
Se cree que la distonía es una afección neurológica (causada por problemas subyacentes en el cerebro y el sistema nervioso). Sin embargo, en la mayoría de los casos, las funciones cerebrales como la inteligencia, la memoria y el lenguaje no se ven afectadas.
Alrededor del 90% de los casos son distonías cervicales (que afectan a los músculos del cuello) o blefaroespasmos (que afectan a los párpados). Ambas son distonías focales que tienden a desarrollarse más tarde en la vida. No suelen empeorar y no afectan a otros músculos.
Si presenta signos típicos de distonía focal de aparición tardía, es posible que no sea necesario realizar pruebas específicas. Sin embargo, pueden ser necesarias pruebas para confirmar si padece distonía primaria o secundaria. Por ejemplo, escáneres cerebrales, análisis de orina o sangre y pruebas genéticas.
La remisión total es más probable en casos de distonía secundaria, como la que se produce tras un ictus. Si alguien padece otra enfermedad subyacente, como la enfermedad de Parkinson, es más probable que los síntomas de la distonía perduren durante el resto de su vida.
Fasciculaciones musculares en todo el cuerpo en reposo
Las fasciculaciones musculares se producen cuando los nervios fallan y provocan la contracción de grupos de fibras musculares. Esto es frecuente en la esclerosis múltiple (EM), debido al daño de las fibras nerviosas que afecta a la señalización entre los nervios y los músculos.
Pero también hay otras causas posibles de los distintos tipos de fasciculaciones musculares, desde la fatiga y la carencia de nutrientes hasta las enfermedades tiroideas, entre otras. Algunas son benignas, pero otras requieren atención médica.
Si padeces esclerosis múltiple, las fasciculaciones musculares pueden deberse a tu enfermedad. O podría deberse a alguna de estas otras causas de las que quizá no te des cuenta de que también vives con ellas. Es importante averiguar el porqué de lo que estás experimentando.
Asimismo, para quienes no han sido diagnosticados de EM, lo mejor es no ignorar este síntoma, ya que es posible que padezcas una afección que requiera tratamiento. Existen tres tipos de fasciculaciones musculares, cada uno de los cuales tiene cierto grado de singularidad.
La espasticidad es un síntoma frecuente en la EM y suele afectar a una o ambas piernas. Es el resultado de la interrupción de las señales entre las motoneuronas superiores y las motoneuronas inferiores. En otras palabras, hay una transmisión nerviosa alterada desde el cerebro y la médula espinal hasta los nervios que controlan los músculos.